Cerca de dos tercios de la población estadounidense tiene sobrepeso. Existen muchas formas para determinar si una persona tiene sobrepeso, pero los expertos creen que el índice de masa corporal (IMC) es la mejor manera de evaluar el peso de un adulto en relación con su estatura.

  • Un índice de masa corporal de 18.5 a 24.9 kg/m2 se considera normal.
  • Los adultos con un índice de masa corporal de 25 a 29.9 kg/m2 se consideran con sobrepeso. Sin embargo hay excepciones; por ejemplo, un atleta puede tener un IMC más alto, pero no tener sobrepeso.
  • Los adultos con un índice de masa corporal de 30 a 39.9 kg/m2 se consideran obesos.
  • Los adultos con un índice de masa corporal superior o igual a 40 kg/m2 se consideran extremadamente obesos.
  • Cualquier persona con más de 100 libras (45 kg) de sobrepeso se considera que sufre de obesidad mórbida.

Una persona con un IMC alto puede tener una cantidad normal de grasa corporal si tiene mucho tejido muscular. Sin embargo, el riesgo de muerte y enfermedad se incrementa para los adultos con sobrepeso y obesos.

El sobrepeso es un estado anormal caracterizado por la acumulación excesiva de grasa en el organismo.

El concepto de sí una persona está excedida de peso, varía con la raza, sexo, edad, época y el lugar. En términos generales es más frecuente en las mujeres y después de los 35 años (aunque puede darse a cualquier edad).

Para que se acumule grasa en el organismo, es necesario que el número de calorías ingeridas sea mayor que el de las gastadas.

El organismo aumentará de peso por recibir y asimilar exceso de alimentación, o por gastar poco de lo asimilado. Esto se deberá a. factores causales exógenos (alimentación excesiva e inactividad) y también puede deberse a factores endrógenos (glandular y endócrino) aunque estos últimos no son los más frecuentes.

Alimentación excesiva

Se puede comer mucho por malos hábitos, por elegir mal los alimentos y por factores afectivos. Con frecuencia una persona reacciona a las situaciones de disgusto o ansiedad, ingiriendo alimentos en exceso y/o bebidas alcohólicas.

También cuando una persona tiene un trabajo sedentario y camina poco disminuye su consumo orgánico de calorías.

A veces so observa que una persona que come mucho y hace ejercicio vigoroso, se mantiene en su peso normal, mientras que al dejar de gastar energía física, aumenta rápidamente de peso, pues sigue comiendo lo mismo que cuando hacía ejercicio, en lugar de reducir su alimentación.

El mismo proceso sucede al llegar a la madurez.

Mal funcionamiento de ciertas glándulas

Otras veces el organismo consume menos alimentos por hallarse afectado el funcionamiento de una o varias glándulas de secreción interna (hipófisis, tiroides, páncreas, glándulas sexuales, suprarrenales, epífisis o glándula pienal), o ciertas zonas del sistema nervioso (hipotálamo). Las glándulas que más influyen son la pituitaria o hipófisis, las glándulas sexuales y la tiroides.

Resumiendo

Comúnmente las personas con exceso de peso comen mucho y hacen poco ejercicio, desconociendo los beneficios del movimiento y la actividad física.

La persona con sobrepeso no solo se queja de la deformación de su cuerpo, sino también de otras molestias como: agitación ante el menor esfuerzo, cansancio fácil, tendencia excesiva al sueño, etc.

Se pueden observar trastornos del corazón, elevación de la tensión arterial, facilidad para infecciones del aparato respiratorio, tendencia a la diabetes, a enfermedades del riñón, hígado y vías biliares, lesiones cardíacas, afecciones de las articulaciones de los miembros, nefritis, arteriosclerosis, edema pulmonar, reumatismo, trastornos menstruales, hernias, etc.

Tratamientos

En cada caso se debe comenzar tratando de descubrir la causa del sobrepeso: exceso de alimentación, falta de ejercicio, factores psicológicos o trastornos endocrinos. Por lo tanto es indispensable consultar al médico, quien aconsejará el tratamiento conveniente, según cada caso.