Durante la adolescencia, el acné es un detractor de la autoestima. Muchos adolescentes, se ven paralizados emocionalmente con la aparicion del acné y presentan dificultades para interrelacionarse con sus pares. El acné afecta a un gran número de seres humanos en algún momento de su vida. Es inconcebible que muchas personas no le den a esta patología la importancia que merece, apelando generalmente a tratamientos hogareños, muchas veces con resultados negativos y hasta catastróficos.
El acné es una enfermedad de la piel que afecta al 80% del mundo en algún momento de su vida. La piel tiene más segregaciones grasas de lo normal y cuando los poros se bloquean esto produce puntos negros, puntos blancos e infección que se manifiesta en forma de barros con cabeza o sin ésta.
Se cree que la mayor influencia son los genes. Sí, es herencia de tus padres. Pero el acné puede agravarse por problemas hormonales, estrés, la alimentación y estilo de vida también influyen.
Hay una bacteria llamada P. Acnes que causa las infecciones en los poros. La condición es común en la pubertad y está considerada como una respuesta anormal ante niveles normales de la hormona masculina testosterona.
La respuesta de la mayoría de las personas disminuye con el tiempo y el acné tiende a desaparecer o al menos disminuye después de la pubertad; de todos modos, no hay manera de predecir cuánto tiempo tardará en desaparecer completamente y algunos individuos continuarán sufriendo acné durante décadas después.
¿Porqué se produce el acné?
El acné se produce cuando los poros de la piel se obstruyen porque la grasa y las células de la piel se acumulan más rápido de lo que pueden salir. La obstrucción ocasiona un abultamiento del folículo (causando puntos blancos) y la parte superior de la obstrucción se puede oscurecer (causando puntos negros).
Si la obstrucción causa una ruptura en la pared del folículo, las células muertas de la piel, la grasa y las bacterias, encontradas en la superficie de la piel, pueden penetrarla y formar pequeñas áreas infectadas llamadas pústulas. Si estas áreas infectadas están en lo profundo de la piel, pueden aumentar en tamaño hasta formar quistes firmes y dolorosos.
El acné no se produce por suciedad, masturbación u otras actividades, pero la suciedad y la grasa en la cara pueden agravar la condición.
Otros factores que incrementan las posibilidades del acné son los cambios hormonales, la exposición a condiciones climáticas extremas, estrés, piel grasa, trastornos endocrinos, algunos tumores y el uso de ciertos medicamentos (tales como cortisona, testosterona, estrógenos y otros).