La Radiofrecuencia es una técnica con la que se corrige la textura de la piel, la flacidez y el volumen, estimula los fibroblastos a través de calor intradérmico, consiguiendo la regeneración de colágeno y mejorando los tejidos y la elasticidad de la piel. Permite atravesar la dermis sin dañarla y acceder a las capas más profundas de la piel consiguiendo un efecto joven.

Se activa la circulación de la zona a tratar, el sistema linfático y el sistema artero-venoso, aumenta el drenaje linfático y la vascularización

El objetivo del tratamiento es la prevención y la corrección para provocar efecto tensor visible desde la primera sesión.

Consiste en la aplicación de ondas electromagnéticas para acceder a las capas más profundas de la dermis sin dañar las capas superficiales acabando con un efecto láser.Consiste en la aplicación de ondas electromagnéticas para acceder a las capas más profundas de la dermis sin dañar las capas superficiales acabando con un efecto láser.

Es un tratamiento inocuo. El paciente tan sólo percibe una sensación de calor poco molesta en la zona a tratar. En caso necesario se puede aplicar anestesia local, siempre bajo control del especialista, aunque no es lo común generalmente.

Duración del tratamiento de Radiofrecuencia

La duración de cada tratamiento depende de la zona a tratar, pero suele durar entre 1 y 2 horas. Los resultados se aprecian de forma gradual, al principio una mayor tensión de la piel. Los resultados son espectaculares desde la primera sesión, pero alcanzan su máxima visibilidad a partir de los 3 meses. Se puede aplicar en cuerpo y rostro.

Sesiones necesaria

Al ser un tratamiento muy eficaz con el que se aprecian los resultados rápidamente se necesitan pocas sesiones siempre dependiendo del paciente y la técnica a usar.

Contraindicaciones

  • Las mujeres embarazadas, durante el periodo de lactancia, personas con cardiopatías graves, con prótesis metálicas o by-pass no pueden realizarse este tratamiento
  • La radiofrecuencia es perfecta para mejorar la flacidez.
  • Es recomendable establecer un horario de comidas para mantener el metabolismo activado de manera uniforme.
  • Reduce el consumo de sal para controlar la retención de líquidos.
  • Seguir las pautas, consultas y cuidados del post-tratamiento que indique el médico.
  • Durante el embarazo recomendamos no realizarse tratamientos estéticos ya que en la mayoría de los casos está contraindicado y puede ser perjudicial para la mamá y el bebé.